Estoy todo el tiempo observandote, no dejo de mirarte ni un segundo, me acerco tanto que casi puedo rozarte las pestañas, crees que soy molesta y peligrosa, pero yo soy tan insignificante que no tenes por que tenerme tanto miedo, por mucho que trates de escaparte, vas a escuchar que estoy revoloteando cerca y en cuanto te canses de querer matarme voy a enterrarme en vos; vos te escondes cuando me ves buscas el modo de librarte de mi.
No hay comentarios:
Publicar un comentario